Algo que me llama profundamente la atención en las vigilias ordinarias es la falta de consenso a la hora de rezar la "Estación Mayor", esta oración se encuentra indicada justo después de la Oración a San Miguel Arcángel y es la oración que inicia el "final" de las deprecaciones que siguen al Acto de desagravio.
Generalmente entre una y otra sección varía la manera de realizar esta oración y en ocasiones, hasta es sustituida, quizá por ignorancia, por un Padrenuestro y Avemaría gloriados y ¡hasta un simple canto eucarístico!
Cuando uno busca conocer qué es la estación mayor, generalmente encuentra que la mayoría desconoce de lo que se trata (sacerdotes incluidos). Algunos optan por indicar que deben rezarse tres veces seguidas el Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre. Sin embargo, este formato de oración muchas veces es considerado una "estación menor" así que es improcedente utilizarlo también por "estación mayor".
El caso es que, a lo largo de mi experiencia en las vigilias y gracias a uno que otro librito donde aparece esta oración, he dado por entender (admito correcciones) que la llamada Estación Mayor, para ser considerada como tal requiere mínimo de CINCO Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre, que se rezan en honor a las CINCO llagas de Jesús. Incluso en algunos libritos de oración muy populares aparece de la siguiente manera:
1)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu mano derecha.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
2)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu mano izquierda.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
3)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu pie derecho.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
4)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu pie izquierdo.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
5)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu costado.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
Ofrecimiento:
En este tabernáculo sagrado,
donde estás mi buen Jesús por mí escondido
mi corazón te adora muy rendido
y mi fe te contempla anonadado.
Esta estación recibe con agrado
como ofrenda de mi pecho agradecido
por el inmenso amor con que has querido
quedar, por nuestro bien, sacramentado.
Remedia nuestros males y aflicciones
da a tu Iglesia alegría, paz, consuelo;
al Papa fortaleza y bendiciones,
extiende tu fe santa en este suelo
para que, unidos en tu amor, los corazones,
logremos adorarte allá en el cielo.
Amén.
Algunos devocionales incluyen dos Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre adicionales: uno rezado por las intenciones del Santo Padre y el otro por la Iglesia. Y en algunas secciones, me ha tocado ver que se rezan en total hasta nueve Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre. Sin embargo, a mi parecer, tal número de oraciones e incluso el ofrecimiento, pudieran omitirse de ser necesario, siempre y cuando se conserve la secuencia de cinco Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
Se pensaría, tal vez, que esto extiende demasiado las oraciones finales previas al cambio de turno y al Santo Rosario; sin embargo, la solemnidad que el rezo de la Estación Mayor (un rezo sosegado y, de ser posible acompañado de breves cantos eucarísticos) confiere al turno es impresionante.
Para mí, en lo personal, la Estación Mayor es el momento cumbre del Acto de Desagravio: estamos aquí para adorar a Jesús, y orar ante Él empleando la Estación Mayor, es situarnos en la dimensión de la Pasión reverenciada e, incluso, compartida. La meditación de la Pasión siempre hace crecer el espíritu y sumerge al alma en la comunión con su Dios.
Para mí, una vigilia ordinaria, sin una real Estación Mayor es como un pastel sin cereza.
Acostumbrarse a rezar día a día la Estación Mayor, y más cuando lo hacemos ante el Santísimo Sacramento, implica adentrarse en la devoción a la Pasión de Jesús y en la contemplación de la misma.
Poder recitar una oración tan bella como esta es, sin duda, una gran bendición.
Generalmente entre una y otra sección varía la manera de realizar esta oración y en ocasiones, hasta es sustituida, quizá por ignorancia, por un Padrenuestro y Avemaría gloriados y ¡hasta un simple canto eucarístico!
Cuando uno busca conocer qué es la estación mayor, generalmente encuentra que la mayoría desconoce de lo que se trata (sacerdotes incluidos). Algunos optan por indicar que deben rezarse tres veces seguidas el Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre. Sin embargo, este formato de oración muchas veces es considerado una "estación menor" así que es improcedente utilizarlo también por "estación mayor".
El caso es que, a lo largo de mi experiencia en las vigilias y gracias a uno que otro librito donde aparece esta oración, he dado por entender (admito correcciones) que la llamada Estación Mayor, para ser considerada como tal requiere mínimo de CINCO Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre, que se rezan en honor a las CINCO llagas de Jesús. Incluso en algunos libritos de oración muy populares aparece de la siguiente manera:
1)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu mano derecha.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
2)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu mano izquierda.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
3)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu pie derecho.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
4)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu pie izquierdo.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
5)Adoramos, Señor Jesús, la preciosa llaga de tu costado.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
Ofrecimiento:
En este tabernáculo sagrado,
donde estás mi buen Jesús por mí escondido
mi corazón te adora muy rendido
y mi fe te contempla anonadado.
Esta estación recibe con agrado
como ofrenda de mi pecho agradecido
por el inmenso amor con que has querido
quedar, por nuestro bien, sacramentado.
Remedia nuestros males y aflicciones
da a tu Iglesia alegría, paz, consuelo;
al Papa fortaleza y bendiciones,
extiende tu fe santa en este suelo
para que, unidos en tu amor, los corazones,
logremos adorarte allá en el cielo.
Amén.
Algunos devocionales incluyen dos Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre adicionales: uno rezado por las intenciones del Santo Padre y el otro por la Iglesia. Y en algunas secciones, me ha tocado ver que se rezan en total hasta nueve Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre. Sin embargo, a mi parecer, tal número de oraciones e incluso el ofrecimiento, pudieran omitirse de ser necesario, siempre y cuando se conserve la secuencia de cinco Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.
Se pensaría, tal vez, que esto extiende demasiado las oraciones finales previas al cambio de turno y al Santo Rosario; sin embargo, la solemnidad que el rezo de la Estación Mayor (un rezo sosegado y, de ser posible acompañado de breves cantos eucarísticos) confiere al turno es impresionante.
Para mí, en lo personal, la Estación Mayor es el momento cumbre del Acto de Desagravio: estamos aquí para adorar a Jesús, y orar ante Él empleando la Estación Mayor, es situarnos en la dimensión de la Pasión reverenciada e, incluso, compartida. La meditación de la Pasión siempre hace crecer el espíritu y sumerge al alma en la comunión con su Dios.
Para mí, una vigilia ordinaria, sin una real Estación Mayor es como un pastel sin cereza.
Acostumbrarse a rezar día a día la Estación Mayor, y más cuando lo hacemos ante el Santísimo Sacramento, implica adentrarse en la devoción a la Pasión de Jesús y en la contemplación de la misma.
Poder recitar una oración tan bella como esta es, sin duda, una gran bendición.
5 comentarios:
totalmente de acuerdo, en que por mas que indago como hacer una Estacion Mayor en la forma correcta mas me dicen diferentes formas de hacerlo y es que en el ritual, no he leido una forma especifica, esta tambien me gusto mucho
Estación Mayor al Santísimo Sacramento
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Adoro Jesús mío la llaga de tu mano derecha y bendigo la hora en que a orilla del lago Tiberiades nos prometiste la Sagrada Eucaristía.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
¡Bendita sea la hora en que Nuestro, Señor Jesucristo instituyó la Sagrada Eucaristía!
¡Bendita sea!
Adoro Jesús mío la llaga de tu mano izquierda y bendigo la hora en que instituiste la Sagrada Eucaristía!
Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
¡Bendita sea la hora en que Nuestro Señor Jesucristo instituyó la Sagrada Eucaristía!
¡Bendita sea!
Adoro Jesús mío la llaga de tu costado y bendigo la hora en que tu Apóstol Pedro celebró la segunda Misa de tu Iglesia.
Padre Nuestro, Ave María Gloria.
¡Bendita sea la hora en que Nuestro Señor Jesucristo instituyo la Sagrada Eucaristía!
¡Bendita sea!
Adoro Jesús mío, la llaga de tu pie derecho y bendigo el momento en que nuestros Sacerdotes, y transubstancian el Pan y el Vino en tu Cuerpo y en tu Sangre.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
¡Bendita sea la hora en que Nuestro Señor Jesucristo instituyo la Sagrada Eucaristía!
¡Bendita sea!
Adoro Jesús mío, la llaga de tu pie izquierdo y bendigo el momento en que levantando el Sacerdote en su mano la Forma Consagrada, nos invita a recibirte.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
¡Bendita sea la hora en que Nuestro Señor Jesucristo instituyó la Sagrada Eucaristía!
¡Bendita sea!
Adoro Jesús Mío, tu Cuerpo entero clavado en la Cruz y bendigo el momento en que fue consagrado S.S. el Papa Benedicto XVI, ofreciendo este Padre Nuestro, Ave María y Gloria por su intención.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
¡Oh Sagrado Banquete en que se recibe a Cristo, se hace memoria de su Pasión, el espíritu se llena de Gracia y se nos da una prenda de la futura Gloria!
Ofrecimiento
Soberano Señor Sacramentado,
Segura prenda de la eterna Gloria;
Esta estación recibe con agrado
por ser de tu pasión tierna memoria.
Haz que destruido el reino del pecado
tu Iglesia Santa cante la victoria
asistiéndola siempre con tus dones,
en sus necesidades y aflicciones.
Hola Oscar Franco
Gracias por compartir esta forma ¡Está bellísima!
Por cierto, recién descubrí, cuando publicaron el listado de productos de la Adnomex, que existen unos formatos impresos de "Estación Mayor", valen como entre 20 y 30 pesos el ciento. Lo malo es que sólo los puedo adquirir por intermedio de mi consejo parroquial y no he tenido oportunidad de solicitarles que me hagan el favor de ordenarlos, porque además existe el inconveniente que ellos no piden a México, sino que ellos adquieren sólo las existencias del Consejo Arquidiocesano.. Eso sí, cuando, primero Dios, vaya a DF me daré una vuelta a ver si puedo adquirir siquiera un millar para distribuir en las capillas de Adoración =)
Qué preciosa Estación Mayor! Muchas gracias por compartir! la oración de Ofrecimiento en ambos casos es preciosa!
¡Gracias! Por compartirlo hermanos.
Dios nos llama a mejorar día a día y esta es una magnífica aportación para ello.
¡Dios les bendiga!
¡Gracias! Por compartirlo hermanos. Dios nos llama a mejorar día a día y esta es una magnífica aportación para ello.
¡Dios les bendiga!
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