viernes, 6 de abril de 2012

Misa Crismal

Jueves 5 de Abril de 2012




La Misa Crismal, donde se bendice el Santo Crisma que se utilizarà en el año para diversos sacramentos (Bautismo, Confirmación, Unción de Enfermos...), es también el momento en que se renuevan las promesas del sacerdocio ministerial.
Aunque vivo en la ciudad que es sede arzobispal, y Catedral me queda a diez minutos en autobús, no puedo dejar de recordar que es una experiencia de carácter misionero: en esta Misa se hacen presentes las numerosas delegaciones de las parroquias de toda la diócesis para recibir los óleos; en ocasiones, asistir a esta Concelebración Eucarística puede requerir varias horas de viaje y siempre hay un clima festivo, previo a la celebración Pascual. Es un tiempo de saludo, de encuentro entre agentes de pastoral, religiosos y sacerdotes con su Obispo.
En esta ocasión, la celebraciòn se vistió de una atmósfera nostálgica. En ella, el Arzobispo, Dn. Luis Morales Reyes, anunció que el día 16 de mayo es la fecha fijada para la recepción oficial a su sucesor, quien desde el pasado 3 de abril ha recibido el nombramiento como nuevo Arzobispo.
Monseñor se refirió a la Semana Santa como "todo un mensaje de morir para resucitar"; se refirió también a sí mismo, a esta nueva etapa en su vida: "muero de ser de una manera y resucito a un nuevo modo de ser... muero a la vida apostólica pública y resucito a la vida oculta de Jesús..." invitó a todos a entrar en la intimidad del Cenáculo: amistad, cercanía. "Jueves Santo es clima de despedida... clima de acción de gracias por la Eucaristía... Jesús está con nosotros, Él es el que nos ofrece su amistad, Él es quien se nos acerca en cada Eucaristía...".
A los presbíteros presentes, en especial, les recordó el sentido de su ministerio: "Ser consagrado es ser santificado... ser un sacrificio arçgradable a Dios Padre cada día... ser ofrenda total al Padre... y ofrenda para el pueblo santo de Dios." Les hizo también una invitación a dejarse expropiar por Dios, para que sea "Èl quien nos posea y nos haga cada día un sacrificio agradable a Él". recordándoles el sentido de servicio a la comunidad. Otras palabras suyas volvieron al momento que está viviendo en lo personal, pero que también pueden aplicarse a todo apóstol de Jesucristo, sea su estado de vida cual fuere:

"...No tengo miedo, porque el Espíritu del Señor está sobre mí"
"... No estoy huérfano, ni sólo, ni abandonado"
"... Cuanto más débil soy más fuerte me vuelvo"




Bendición de los Óleos


Salida de Dn. Luis. La gente cortándole el paso, solicitando bendiciones y agradeciéndole por tantos años al frente de la Iglesia Potosina.


Más muestras de cariño


Delegaciones parroquiales recibiendo los Santos Óleos

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